Os traigo unos cuantos gráficos en los que se explica de manera muy sencilla la diferencia entre izquierda y derecha como cuestión sobre las preferencias acerca de los posibles resultados de la economía (nivel de producción y nivel de distribución).
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El primer gráfico intenta representar las posibilidades reales de una economía: para un nivel dado de igualdad o desigualdad que pudiera tener una sociedad (eje horizontal), la curva nos dice cuál es el nivel máximo económicamente posible de producción que en esa sociedad se podría alcanzar. Por supuesto, el nivel de producción que realmente se alcance puede ser menor, pero supongamos, para simplificar, que tenemos el nivel máximo de PIB que es económicamente viable generar dado un cierto nivel de desigualdad.
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La forma de la curva viene a significar que si la desigualdad es muy grande (izquierda), la sociedad no será muy productiva, por varias razones: p.ej., la mayor parte de la gente no tendrá un grado de formación suficiente para poder hacer trabajos muy productivos; el incentivo para mejorar la producción, sabiendo que tus posibilidades de prosperar son pocas, también será bajo; el estado tendrá que gastar muchos recursos para impedir o reprimir las protestas sociales, etc., etc.
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Por otro lado, si la igualdad es muy grande (derecha), la sociedad tampoco será muy productiva, porque si la gente sabe que va a recibir exactamente lo mismo, o casi lo mismo, con independencia de cuánto se esfuerce, de cuánto innove, de cuánto intente mejorar lo que está haciendo, etc., entonces tampoco habrá un nivel de producción demasiado alto.
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Por lo tanto, la curva de producción tendrá seguramente un máximo en algún lugar entre los dos extremos de máxima desigualdad y de máxima igualdad. La forma concreta de la curva (p.ej., si su altura en el punto 0 del eje de ordenadas es mayor o menor que su altura en el punto 1, o cómo de verticalmente crece al principio o decrece al final) no es muy importante para mi argumento. Pero lo importante es que nos demos cuenta de que la curva será la que es, con independencia de lo que nosotros pensemos o deseemos acerca de ella. El objetivo de las ciencias sociales debería ser descubrir cuál es la forma real de la curva, y cuáles son las formas de conseguir realmente que sea más alta de lo que es, no sólo convencer al adversario de que las ideas que tiene sobre la forma de la curva son debidas a su ideología. Este tema es muy interesante, pero lo dejaré para la siguiente entrada sobre el tema. Ahora voy a asumir que la curva de producción tiene una determinada forma, y explicaré la diferencia entre "ser de derechas" o "ser de izquierdas" en términos de nuestras preferencias sobre qué punto de la curva es el que nos parece socialmente preferible.
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Cada punto del gráfico está definido por dos variables: cuánta igualdad tiene la sociedad si se encuentra en ese punto (el valor del punto en el eje horizontal), y qué producción tiene en ese punto (su valor en el eje vertical). Cada persona puede tener preferencias distintas sobre esta cuestión, es decir, si seleccionamos DOS puntos al azar en el gráfico (no en la curva, sino en cualquier punto del gráfico), podrá ocurrir que una persona prefiera el primer punto al segundo, y otra persona, en cambio, prefiera el segundo en vez del primero.
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Si ahora tomamos a una persona y le mostramos UN punto cualquiera del gráfico, podríamos representar también TODOS los puntos que para esa persona son igual de buenos o igual de malos que ese punto. Normalmente, esos puntos estarán incluidos en una línea (como las líneas de nivel en los mapas físicos, o las isobaras en los mapas del tiempo), que llamamos "curva de indiferencia".
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Pues bien, el segundo gráfico muestra las preferencias (idealizadas, en el sentido de simplificadas al máximo) de un "neoliberal": lo que a él le importa es que la economía tenga el mayor PIB posible, y cómo se reparta ese PIB le trae sin cuidado. Sus "curvas de indiferencia" son, de este modo, líneas horizontales (cada línea horizontal representa situaciones en las que el PIB es exactamente igual). Si de dos puntos uno de ellos representa una mayor producción que el otro, nuestro "neoliberal" preferirá el primero. ¿Cuál será el punto de la curva que preferirá? Pues, obviamente, su máximo.
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El tercer gráfico muestra las preferencias (idem) de un "igualitarista": cómo de productiva sea la sociedad no es lo que le preocupa primordialmente, sino cómo de igualitariamente repartida esté la riqueza, de modo que, cuanta más igualdad, mejor. Para él, las curvas de indiferencia son líneas verticales, y su óptimo es, por supuesto, el punto más a la derecha.
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Pienso que la mayor parte de los miembros de las sociedades democráticas no tenemos preferencias que coincidan con estas dos idealizaciones, sino que más bien nuestras curvas de indiferencia son inclinadas (y con pendiente negativa, o sea, decrecientes), como en el cuarto gráfico, lo que quiere decir que valoramos el nivel de riqueza Y TAMBIÉN el nivel de igualdad: en ocasiones preferimos renunciar a un poco de riqueza en nuestra sociedad, si ello sirve para elevar en una medida considerable el nivel de igualdad, pero también preferimos renunciar a un poco de igualdad si ello sirve para elevar considerablemente el nivel de riqueza. (Que las curvas, además de inclinadas, sean curvas -convexas, más en concreto- y no rectas, tiene otra justificación, pero es un poco complicada y no merece la pena detenernos en ello). Nuestro "óptimo social" se hallará, por lo tanto, en algún lugar de la curva de producción comprendido entre su máximo y su extremo inferior derecho.
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Cuánto de inclinadas estén nuestras "curvas de indiferencia" sociales será una medida, por lo tanto, de "cuánto de izquierdas" somos cada uno. Cuanto más horizontales, más de derechas. Cuanto más verticales, más de izquierdas. Cuanto más de derechas, más elevado estará nuestro óptimo social (es decir, menos igualdad desearemos, a cambio de un nivel de producción elevado). Cuanto más de izquierdas, menos elevado estará nuestro óptimo en el gráfico (es decir, más igualdad desearemos, aunque sea a costa de tener menos riqueza que repartir).
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El principal problema de los debates políticos es que en realidad, sabemos muy poco acerca de "por dónde pasa realmente la curva de producción", y esto nos hace tender a confundir la realidad con nuestros deseos. Pero, como digo, ese asunto lo dejo para otra entrada.
Muy interesante.
ResponderEliminarSupongo que cabe la posibilidad de que la curva de producción varíe (y varíe mucho) según factores culturales, ambientales e incluso geográficos (por proximidad a otras sociedades). Entre los factores adicionales que podrían incluir así "ruido" tal vez cabe mencionar que sociedades distintas podrían distribuir de manera distinta la estima social o estatus con efectos distintos sobre la curva de producción. Por otro lado, países más chovinistas o con nacionales con dificultades culturales de integrarse en terceros países podrían permitirse ser más igualitarios por cuanto no tendrían que temer la fuga de talentos a países más "meritocráticos".
En todo caso me gustaría subrayar la posiblidad de que haya diferencias culturales importantes que afecten las curvas de producción.
La "curva de producción" representa lo máximo que se puede producir en una sociedad determinada en función del grado de igualdad que elijamos. Naturalmente, esa curva cambia de sociedad a sociedad, e incluso de momento a momento en una determinada sociedad, y depende de millones de factores distintos. Claro que sí.
EliminarHola Jesús:
ResponderEliminarEl problema real es que no se trata sólo de productividad económica sino social en su conjunto. Es decir, que se trata de algo que combina productividad y cohesión social y que es lo que realmente da el valor de una forma de sociedad.
Y eso se refleja en la capacidad para competir entre distintas formas de sociedad. Eso es algo que Marx debería de haber dejado claro a los que lo leen. Y un poco de biología de la evolución y de la sociabilidad tampoco vendría mal.
Sursum: por supuesto, lo que hago es descomponer el GRADO DE PREFERENCIA por un determinado "estado social" en función de un par de variables con las que podemos describir ese estado.
ResponderEliminarNo comentarios anónimos, por favor
ResponderEliminarJesús:
ResponderEliminarMe parece muy bien tu intento de visualizar las opciones "derecha-izquierda" en función de la relación "producción/reparto". Aunque creo que eso sólo se refiere a posturas políticas individualistas frente a colectivistas y no exactamente a derecha-izquierda "realmente existentes" ;-)
Supongo que podemos ver la disminución de la producción con respecto al máximo para cada coeficiente (¿Gini?) de igualdad como el coste económico del modelo social. Pero hay que tener en cuenta dos cosas: la primera, que evidentemente el coste o beneficio de la igualdad/desigualdad no es el mismo para cada nivel de riqueza y que eso explica muchas opciones ideológicas; y la segunda, que las opciones ideológicas también pueden ser objeto de transacciones económicas en forma de clientelismo.
Pero mi crítica iba más en el sentido de que las sociedades y sus segmentos ideológicos, económicos o sociales están en permanente conflicto y que es a ESO a lo que debemos atender en una explicación, más que a los meros gustos: a cómo cada opción y su puesta en práctica compite con las demás y a quién, en definitiva, sobrevive con el uso de su cultura.
Por cierto, una pregunta: ¿puede una curva de indiferencia socialdemócrata tener la misma pendiente en cada punto que la del PIB a partir del máximo hacia la derecha y eso en qué la convierte como opción política?
Sursum
ResponderEliminarNo entiendo tu crítica. ¡Pues claro que hay conflicto! Pero un conflicto es un conflicto porque partes distintas tienen preferencias distintas sobre cómo hacer algo.
Mi crítica va en el mismo sentido de no limitarse a constatar que los planetas trazan órbitas sino hacer explícitas las interacciones que llevan a que tracen órbitas.
ResponderEliminarHay distintos gustos, como hay movimientos o mutaciones al azar, pero el hecho de que los gustos sean unos y no otros -y lo mismo para lo demás- es lo que se debe explicar. El gusto individual puede ser un mero sentimiento o el resultado de un proceso no tan simple. Por ejemplo, que al izquierdista definido por tu gráfica le "guste" la igualdad aunque se pierda PIB.
Por eso te digo que tu "visualizacion" del gusto izquierda-derecha está claro y se traduce en el precio económico que se "paga" por el modelo social. También en el caso de un modelo antitigualitario visualizado como una linea vertical en la zona de mayor desigualdad de tu gráfica, que asume una menor productividad del conjunto de la sociedad como precio por apropiarse de una proporción tan grande de la riqueza como crea conveniente.
Es decir, que si nos mantenemos a un nivel meramente descriptivo, cada tipo de linea de preferencias visualiza un modelo económico y social -aunque no exactamente la diferencia derecha-izquierda- pero de esa manera no hacemos explícitas las fuerzas de creación y acumulación de la riqueza.
Y eso sin tener en cuenta que no sólo nos movemos en un sistema de creación y reparto "espontáneo" de la riqueza, sino que cada agente del sistema trata de maximizar sus beneficios por participar en él y que el resultado incluye la fuerza de modelos coactivos y/o ideológicos.
Por ejemplo, en tu gráfica no parece que puedas distinguir un modelo en el que se crea poca riqueza y una clase dominante se la apropia de otro en el que partiendo de un modelo de poca riqueza pero con reparto igualitario, los agentes más activos y creativos de la sociedad CREAN mayor riqueza y esperan beneficiarse de ello, con el resultado de una mayor desigualdad que, sin embargo, implica ganancias de riqueza en todos los segmentos sociales.
Sursum:
ResponderEliminarde esa manera no hacemos explícitas las fuerzas de creación y acumulación de la riqueza
Claro, ni las fuerzas de creación de nuevos seres humanos mediante el sexo. Pero no lo pretendía.
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Pues la estructura de la sociedad y de la economía dependen justo de eso que no pretendías.
ResponderEliminarY con el descenso del PIB, a pesar de la mayor igualdad, llega un punto en que trabajas lo mismo o más, consigues mayor porcentaje del total, pero ¡GANAS MENOS! Y tu sociedad ya no puede mantener los niveles de bienestar que tenía cuando el malvado fabricante de tractores se lucraba vendiéndolos en lugar de las igualitarias azadas.
Todo esto tómalo con un poco de humor... ;-)
Sursum: pues claro
ResponderEliminarNo voy a analizar su entrada en cuanto a sus curvas de producción y las preferencias de neoliberales e igualitaristas. Ingenioso modelo, sin duda. Sólo le voy a dar un par de ideas sobre producción y desigualdad en base a lo leído en la primera parte del post. Por si le sirven de algo.
ResponderEliminarEn cuanto a la relación de la desigualdad con la producción, en mi opinión, si ESTA DEMOSTRADA por la evidencia de que a más desigualdad menor producción.Se entiende, por supuesto, que estamos hablando de menor producción de la mayoría social.Porque la producción de élites no se resiente en absoluto. Al contrario. Teóricamente se demuestra por el hecho de que toda producción esconde, se basa, en una transferencia, una extracción de rentas. Si hay desigualdad de base entre los agentes económicos en una sociedad, los de mayor capacidad se limitan principalmente a extraer renta a los menos capaces. Transferencia de rentas de 'abajo hacia arriba' Elites acumulan riqueza no por nueva producción, sino 'por desposesión' (D.Harvey). La generación de riqueza por nueva producción se da más y mejor en entornos económicos igualitarios: la dificultad por extraer rentas ya existentes entre agentes económicos con capacidades y competencias similares, 'obliga' a crear nueva producción. Dos evidencias. La primera en España, el último año y medio. Una supuesta recuperación con PIB incluso notables y sorprendentes que no repercute en la población. No daré datos por no alárgame (ni yo soy un profesional de la economía-política con datos a mano, etc...) pero es una opinión bastante asumida incluso por economistas liberales: la recuperación, hasta hoy, se ha quedado en el IBEX. En mi opinión, además, no habrá goteo. La segunda evidencia, en la OCDE desde mediados de los ochenta. La producción bajando y la desigualdad aumentado.
Sobre la igualdad y la riqueza. SI ESTA DEMOSTRADO que combinar, y al mismo tiempo, producción e igualdad aumenta la riqueza. La evidencia, en la OCDE, en la ‘treintena gloriosa’.
LO QUE YO NO VEO DEMOSTRADO por la evidencia es la hipótesis de su nota de que mayores cuotas de igualdad en los ingresos puedan dar lugar a descenso en la producción. Por causa de un supuesto desincentivo. Por un lado se olvida de que un flujo económico no sólo contiene ingresos. También da lugar a las variables de gasto y ahorro. Es decir, aunque a las personas les pudiese causar un cierto desánimo el alcanzar ingresos iguales hagan lo que hagan,-tampoco es esa la propuesta igualitaria- ese mismo ingreso puede después gastarse de diversas y casi infinitas formas. Y, sobre todo, esas personas pueden obtener diversas cantidades de ahorro. Distintos e incentivadotes ahorros. Por otro lado, la evidencia sobre la igualdad de los ingresos no demuestra esa hipótesis del desincentivo en absoluto. Ni en la ‘’treintena gloriosa’’ en los países mencionados (con igualad in crescendo), ni hoy en las empresas privadas con puestos de trabajo estándar que les reportan a sus empleados ingresos casi iguales a millones de empleados, etcOtro ejemplo de empleados con salarios similares, y a lo largo de toda su vida laboral, es la de los funcionarios estatales Yo no veo nada desincentivados a todos eses colectivos. Descensos en la producción del último grupo mencionado, en mi opinión tendrían más que ver con su posición desigual (superior) con respecto al general social y no con sus sueldos idénticos.
Antonio: no es que incrementar la igualdad haga descender necesariamente y en todos los casos la producción. Al contrario: lo que dice el primer gráfico es que hay niveles de igualdad en los que, al aumentarla, puede aumentar la producción: las sociedades DEMASIADO desiguales suelen ser DEMASIADO POCO productivas. La cuestión es que a partir de ciertos niveles de igualdad, aumentarla sólo puede hacerse a costa de acciones legales o políticas que llevan a disminuir la producción. Tengo pocas dudas de que NUESTRA situación está más probablemente en en la CRECIENTE del gráfico uno que en el decreciente (es decir, estamos en una situación en la que TANTO la igualdad como la producción pueden subir). Pero esto tampoco implica que CUALQUIER medida posible para incrementar la igualdad vaya a incrementar la producción (y de hecho, tampoco implica que vaya a incrementar DE HECHO la igualdad: el problema con la inmensa mayoría de las medidas políticas es que en realidad NO SABEMOS si van a conseguir lo que esperan quienes las aprueban).
ResponderEliminar.
Por otro lado, me temo que tienes demasiado mitificados los "treinta gloriosos" (que para mí también son gloriosos, no tengas duda).
Primero, el nivel de desigualdad no descendió en esa época SOLO por las medidas socialdemócratas (que me parecen estupendas), sino también porque gran parte de la riqueza de los ricos desapareció durante las guerras mundiales y la crisis de los 30 (Piketty dixit).
Segundo, el nivel de desigualdad durante ese periodo (sobre todo los ultimos 15) también disminuyó mucho en España, a la vez que aumentó mucho el PIB, y no fue precisamente porque Franco tomase medidas políticas para expropiar a la clase capitalista.
Tercero, lo mismo ha ocurrido en muchas partes del antes llamado "tercer mundo", sobre todo en el sudeste de Asia, a partir justo del final del periodo de los "treinta gloriosos" y del inicio del "capitalismo global tatcheriano": su PIB per capita y su nivel de igualdad han mejorado sustancialmente.
Vamos, que yo soy más bien socialdemócrata, pero también tengo la suficiente modestia intelectual como para que, si se me apareciese el ángel Gabriel y me dijera "en este papel tengo escrita la respuesta absolutamente correcta a la pregunta de si una socialdemocracia keynesiana con elevados impuestos y controles de capital es el sistema que mejor permite combinar el crecimiento económico y la igualdad social, y la aplicaremos si respondes que sí y es que sí, pero tú y tu familia sufriréis un tormento eterno si respondes que sí y es que no"... pues digo, si me planteara esa cuestión de ese modo el ángel Gabriel, creo que me abstendría, y creo que casi todo el mundo también.
:-)
Sobre la reducción de la desigualdad de la Treintena Gloriosa.
ResponderEliminarLos supuestos efectos de la 2ª G. M y la crisis del 29 en la desaparición de la riqueza de los ricos y el subsiguiente efecto ‘igualatorio’. Esta tesis es falsa, estimado Zamora. Y floja. No se lo que dice Piketty sobre ello, pero esta hipótesis falla en que si bien los ricos se bien afectados por la guerra y su destrucción, el resto de la población se ve tanto o más afectada. De un modo teórico y esquemático si una guerra afecta a una sociedad de dos miembros, en la que un ciudadano posee el 80 % (800 Uds.)de la riqueza y el otro posee el 20%,(200 Uds.) y si esa guerra guerra afectara inicialmente a la mitad de la riqueza existente, el resultado será que el ciudadano rico se quedaría con 400 Uds. y el pobre con 100 Uds. Es decir, al final de la guerra tendrían la misa proporción inicial. Si esta usted pensando en que las fábricas de ricos se pueden ver especialmente afectadas en una guerra, piense, de paso, que sus obreros estarían bastante más afectados al quedarse temporalmente sin empleos , y que, en general, la capacidad de recuperación de la ricos va a ser más rápida y mayor que la del resto.El mismo análisis es aplicable a los efectos de la crisis económica.
Un ejemplo real y práctico de hoy . La crisis del 2008, igual o peor que la del 29 (En España es peor en materia de empleo que la de USA de esas fechas) ¿ha reducido la desigualdad a pesar de haber llevado a la ruina a un buen nº de empresarios y fortunas? No. En absoluto. Sucede todo lo contrario. Como bien sabe, todos los índices de desigualdad han AUMENTADO. Y lo ha hecho, simplemente, porque esa misma crisis ha llevado a MCUHOS MAS ciudadanos a mucha más miseria que a los ricos. Además, esta completamente estudiado en la literatura económica que en los períodos de recesión la riqueza se concentra todavía más. La causa es que las capas altas de la población detraen (extraen, transfieren) recursos de las capas más bajas para asegurar y mantener su posición afectada. Estoy seguro no ha olvidado los recientes ‘rescates’ bancarios. Por si le sirve de algo, y aunque usted no lo haya expuesto, la tesis de la 2ª G. M también se utiliza para justificar falsamente parte del crecimiento de la ‘Treintena Gloriosa’. No le voy a dar datos ni fuentes, dado que ni tengo tiempo para esto( ni me dedico profesionalmente a la economía-política), pero le puedo indicar que si he visto los datos, de fácil acceso público para cualquier interesado, que atestiguan que tanto el PIB anual como la inversión bruta previos a la guerra se recuperaron en la totalidad de países de la OCDE.en no más 3 o 4 años.
Sobre la reducción de la desigualdad en España (en ese período) o en el Sudeste Asiático desde 1.980 tal como afirma, no estaría tan expeditivo como usted. No se le voy a rebatir categóricamente porque no dispongo de eses datos ahora. Pero le animo a que usted si lo haga. España hoy tiene los peores índices de igualdad de Europa (su I.Gini debe andar próximo al 0,4) y nuestro querido dictador no llevo el PIB público más allá del 15% (años 70). Por tanto es casi imposible que su reducción de la desigualdad haya sido relevante. En los tigres asiáticos y en la propia China sucede lo mismo. De estes países si he visto que sus índices de igualdad ha empeorado notoriamente después de ese simpático ¿¡capitalismo tacheriano global?¡. Sin la intervención del Estado, Sr. Zamora, sin ese representante de la ciudadanía como agente económico principal, incorporación sucedida SOLO EN EL SIGLO XX (desde Octubre 1917 para ser exactos-no se asustará), no hay reducción de la desigualdad. NO PUEDE HABERLA. Hágame caso, Sr. Zamora. Este tema ‘me lo sé’. Con absoluta seguridad. Al 99 % de probabilidades. La mayoría de los economistas lo saben, por otro lado. No los ‘mainstream’, desde luego.
,Es posible que en otra ocasión le explique que, en realidad, no tengo demasiada obsesión con la Treintena Goloriosa. Y que si le hable algo de mi socialismo democrático como origen y solución de su socialdemocracia-kenesyana
Saludos
Una ultima cosa. El voto económico ergotrópico explica su abstención en el caso de su metáfora del arcangel Gabriel. Y la no-abstencion de su posición política-económica real.
ResponderEliminarAntonio
ResponderEliminarNo sé qué artículos o libros académicos habrás leído para sacar tus irrefutables ideas sobre esta cuestión; me gustaría que me los citases para aprender de ellos (aunque me extraña que sean ideas que correspondan a la "mayoría" de los economistas, pero no a los "mainstream"; digo yo que los mainstream serán mayoría, si no, no serían mainstream).
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El caso es que tu supuesto argumentos se basa en una falacia de las que se intentan quitar en primero de económicas: la confusión entre renta y riqueza. Incluso asumiendo que una guerra destruyera en igual proporción la RIQUEZA de ricos y pobres (lo que no tiene por qué, al menos en una guerra como la de 1914-1945: la mayoría de los pobres no tienen NINGUNA riqueza que destruir, luego cualquier eliminación de riqueza de los ricos hará disminuir la desigualdad en la distribución de la riqueza), incluso asumiendo, digo, como asumes tú, una destrucción de riqueza igual, se te olvida el pequeño detalle de que la RENTA de los ricos procede de los rendimientos de su RIQUEZA en una proporción mucho mayor que la de los pobres de la suya: digamos que la renta de los ricos consiste en un 90% en rendimientos de su patrimonio, mientras que la renta de los pobres consiste en un 90% en su salario. De este modo, si la guerra destruye la mitad de la riqueza de los ricos y la mitad de la de los pobres, habrá destruido el 45% de la renta de los ricos, pero sólo un 4,5% de la renta de los pobres, con lo que la desigualdad en la distribución de la RENTA habrá disminuido sustancialmente (a pesar de que no lo haya hecho, en este caso hipotético, la desigualdad en la distribución de la riqueza).
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En fin, sobre lo del ángel Gabriel, me temo que no quieres decir con "voto económico ergotrópico" y la posible diferencia entre eso y "mi posición política-económica real", ni la relevancia de ambas cosas para mi pregunta. Ni, por supuesto, veo por ningún lado tu respuesta a qué harías TÚ ante la propuesta del arcángel.
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Un saludo
Sobre el concepto de mayoría. Una cosa es la mayoría de personas/individuos ( al que me refiero, cuando hablo de mayoría de economistas) y otra, muy distinta, es la mayoría del capital. Esta última, como bien sabe, es la que da forma y contenido a la 'mainstream': universidades, publicaciones, medios de comunicación, etc.. Los economistas 'mainstream' son minoría en cuanto a nº de individos, pero no lo sólo en cuanto a capital, y por tanto, influencia, etc.. Es decir, es lo mismo que le pasa a los físicos, químicos, biólogos y... filósofos de la ciencia. Lo entiende, seguro.
ResponderEliminarPor otro lado no le voy a dar referencias, fuentes, etc...No tengo tanto tiempo, y esto no es más que una charla informal. Lo admitirá.
Sobre la igualación económica tras una guerra o una crisis.El debate se resuelve, observando los índices de igualdad de los años inmediatamente posteriores a 1945. Échele una ojeada y vera como no existe ninguna igualación. El ejemplo (en vigor y en curso) que le puse sobre los efectos de la crisis del 2008 sobre la desigualad es un caso empírico, claro e IRREFUTABLE. De hoy mismo. Si usted con este caso práctico no admite que es lo que sucede con la desigualdad en un país cualquiera en el que se dé un caso de destrucción masiva de riqueza (sea guerra o crisis económica), me rindo. No puedo hacer más. Aunque sólo un detalle más por si tenemos suerte.Fijese que en su explicación (que no es incorrecta) de ricos con rentas patrimoniales y el resto con renta salariales, se le ha ¿olvidado'? percatarse de que los obreros además de quedarse sin su 4, 5 % (5%, en realidad) de rentas patrimoniales, la guerra los va a dejar inicialmente, y durante años, ¡sin su 90% de salarios¡ al quedarse sin empleo. Por otro lado, si va decir que la cuestión es un problema de distinguir entre riqueza y renta, quizás debería dejar la charla. Primero porque, en su ejemplo no tiene sentido alguno plantear esa diferenciación. Usted sólo esta hablando de los diferentes tipos de rentas entre ricos y obreros. Y segundo, por beneficio de mantener un mínimo nivel en mis discusiones.
Sobre su metáfora del arcángel Gabriel casi voy a dejar a un lado la hipótesis que plantea dado su aspecto formal de juego dialéctico (que no me apetece demasiado) y me voy a centrar en su posición ‘real’ sobre la socialdemocracia. Le recuerdo: básica y económicamente la socialdemocracia no es más que el Estado ejerciendo de actor económico. No conozco su voto económico egotrópico (no ergo) y voy a ser sólo un poco crudo: ¿a usted le parece que usted y 4 millones más de funcionarios (cifra aprox.) tienen una posición real de abstención sobre la socialdemocracia? ¿La más mínima posición de duda? Creo que su familia, y la de resto de empleados públicos, lejos de haber perecido (como en la metáfora), gracias a ella si han podido desarrollar un digno estatus de vida que supongo no rechazará. ¿O si? Por decirlo gráficamente: antes al contrario, en mi opinión ustedes los funcionarios SE HAN APROPIADO DE LA SOCIALDEMOCRACIA (Y DE SUS BENEFICIOS), y ''después de mí el diluvio''. Y.
Saludos,
Una correción. En su ejemplo los obreros no se quedarían sin su 90% de sus rentas salariales tal como he afirmado, sino sin el 45 %. El hecho de que la destrucción por la guerra de la mitad de la riqueza patrimonial se llevaria la mitad de sus empleos y sus salarios, los cuales no salen de la nada y si del correspondiente patrimonio empresarial de los ricos no será necesario explicarlo.
ResponderEliminarY otra crudeza. La actitud refractaria de los empleados públicos (en general, no su caso) mostrada hacia la función pública y hacia la extensión del Estado Social al conjunto de la economía y población me parece un simple caso más de sub-élite extractiva. Daron Acemoglu y James Robinson dixit.
ResponderEliminarAntonio:
ResponderEliminarSobre el tema de "observar los índices de desigualdad", precisamente te contesté observándolos; puedes hacerlo tú mismo en este enlace, o en este con más detalle para EEUU. Como ves, la desigualdad de la distribución de la renta disminuye mucho coincidiendo justo con las dos guerras mundiales y con la crisis del 29. Si tú tienes datos distintos y que crees que son mejores, pasámelos. Que la desigualdad ha aumentado con la crisis de 2008 no lo estamos discutiendo; lo que discuto es tu afirmación de que SIEMPRE, NECESARIAMENTE, una crisis, guerra, etc., implica un aumento de la desigualdad. Esa afirmación es empíricamente falsa como afirmación UNIVERSAL (es decir, hay casos en los que una crisis hace aumentar la desigualdad -la actual, la de los 70-, y casos en los que la hace disminuir -la del 29, las guerras mundiales...).
Sobre tu idea de que los economistas no-mainstream "son mayoría", pues en fin, no sé tampoco qué censos de economistas manejas. Y la extensión de tu planteamiento a los "químicos, biólogos y filósofos de la ciencia".... pues no sé cómo interpretarla (salvo como el fruto de una mente llena de prejuicios, claro): ¿dónde se supone que están esas "mayorías" de químicos o filósofos de la ciencia no-mainstream?, y, para el caso, ¿estás dando por supuesto que yo sería un "filósofo-de-la-ciencia mainstream", y como tal, con toneladas de "capital" e "influencia" (pecaminosa) a mi disposición para conseguir evitar que las masas obreras adopten la supuesta "filosofía-de-la-ciencia no-mainstream" que sería la guay del paraguay, en vez de la "mía"?
Por último, sobre el tema de los funcionarios, me temo que sigo sin entender un carajo de qué es lo que quieres decir con "egotrópico". El aroma de lo que dices me lleva a pensar algo así como que tu opinión es que los funcionarios estamos en un nivel de maldad equiparable al de los villanos de 007. Leí el otro día que se va a restaurar la arena del Coliseo de Roma para poder hacer espectáculos dentro, así que te animo a encabezar una solicitud para que los funcionarios seamos arrojados a los leones en la nueva temporada circense.
Le voy a responder sobre su propio texto, si le parece,
ResponderEliminar‘’Sobre tu idea de que los economistas no-mainstream "son mayoría", pues en fin, no sé tampoco qué censos de economistas manejas’’ Un registro del Colegio de Economistas, p.ej. (puede haber otros censos). Como mainstream hoy tenemos una sola escuela: el monetarismo- nuevos clásicos, siguiendo a Friedman, Lucas, Barro, Sargent, etc...Y en el ‘resto’podemos incluir a los neo-keynesianos, discípulos de Akerlof, Yellen, Blanchard, Greg Mankiw, post keneyanos-Stiglitz, Krugman, etc..y los Marxistas- Anwar Sahiakh, Mandel, etc.. Si usted analiza, observa (y no es necesario una gran investigación) toda la producción de textos económicos de universidades, think-tanks, medios de comunicación, que LLEGA AL CONSUMO DEL GRAN PUBLICO procede si o si de la primera escuela. Y un poquito de (y en retroceso) las keynesianas. Eso es tener la mayoría del capital. ¿Donde están los demás, pregunta usted? Están también en este planeta, sin duda, y exactamente están en los mismos sitios que los mainstream (universidades, escuelas privadas, editoriales, medios, etc.). Su problema es que su producción económica simplemente no satisface los requisitos del capital dominante en los medios de divulgación para que pueda llegar al consumo general. Y tampoco es necesaria una gran investigación para observar que si son mayoría en nº de personas.
¿De donde sale esta ‘disparidad de mayorías’ en economía y en el resto de ciencias? Sale precisamente de la disparidad de capital. De la distribución del capital. Sale del 80% (élites)/20 % resto, ratio que , aprox, .le he indicado que es el ratio de distribución del capital (riqueza) a día de hoy?
‘’estás dando por supuesto que yo sería un "filósofo-de-la-ciencia mainstream"’’. Le he puesto la profesión de filoso de la ciencia, junto al resto de ciencias, sólo como ejemplo. Como ejemplo que la distribución de capital AFECTA a todas las ramas del conocimiento. No puede ser de otro modo. Son las condiciones de producción (el capital, su distribución y sus relaciones) en cada época histórica la que determinan y desarrollan el resto de estructuras sociales: ideológicas, jurídicas, políticas, culturales, técnicas y científicas. Se ha incluido usted sólo, como ve, en la corriente principal de la filosofía de la ciencia. Usted verá porque.
No estoy en esta ocasión para demasiado internet. Si le parece le responderé al resto del comentario otro día
Saludos,
Le voy a dejar un pequeño 'off-topic'' para su reflexión. Es sobre el 80 % 20 % de la distribución actual del capital-riqueza. En Occidente principalmente. Una minoría, digamos el 20%, posee el 80% de la riqueza. Distribución de capital que yo le expuesto que da lugar a una muy, muy similar distribución entre la producción intelectual (y de toda producción): una minoría de científicos (mainstream) monopolizan el 80 % de la producción científica, etc...
ResponderEliminarPues bien, fíjese que esa distribución 80-20 es la conocida 'regla de Pareto'. El economista italiano había observado esa distribución de la riqueza en su país. Es una regla que se usa mucho hoy en Economía de empresa, Logística,.. Incluso en Poltica.Lo que a mi me choca de ella, pero no me sorprende, es que Pareto la consideraba como una constante universal. Al nivel las constantes físicas como la temperatura del agua, etc...Pareto, un científico de 1º nivel, estimaba que esa distribución 80-20 en el reparto de la riqueza era una regla NATURAL, HISTORICA E INAMOVIBLE... Por los siglos de los siglos. Se lo menciono para, a) hacerle ver que en 2015 hemos retrocedido a distribuciones del capital próximas a la de finales del siglo XIX (y otros índices económicos lo avalan), y esto no es ninguna bagatela en materia socio-política y sus consecuencias ¿disruptivas?, b) que la condiciones y estructura del capital y sus relaciones económicas derivadas en cada época DETERMINAN TODO en sus sociedades: el pensamiento científico, político, ideológico, artístico, etc... y que c) Pareto estaba finalmente equivocado. En la Treintena Gloriosa, p. ej., la distribución de capital llego a estar en 65-45, y en siglos anteriores la distribución era más bastante más desigual. La revista Times saco hace unos días una poco científica con seguridad, pero válida y simpática lista de los 10 personajes más ricos de la historia. Échele un vistazo.
Saludos
Sobre sus gráficas de la desigualdad. Decirle que yo utilizo gráficas para todo el siglo XX procedentes de datos de la Paris School of Economics sobre la mayoría de países de la OCDE. Ingresos TOP 1%, TOP 10 %, etc...En su página Web se ven los datos y gráficas fácilmente. Los resultados son muy similares a los suyos (Piketty).El problema surge al momento de interpretar esas graficas. Le admito que, a falta de realizar un estudio econométrico exhaustivo resulta difícil esa interpretación. Le daré la mía:
ResponderEliminar1º De un anterior supuesto suyo. Tampoco teóricamente es posible que una guerra afecte más a los ricos que obreros. Incluso en el supuesto de su comentario en que los obreros tenían 0 riquezas antes de la guerra (y por tanto no se destruyen). Si tenían 0 riquezas antes, debe tener 0 después, y por mucho que los ricos si pierdan su riqueza, al final los dos colectivos mantienen sus mismos porcentaje RELATIVOS en la fecha post-guerra. La guerras podrían reducir la desigualdad inter-países (el país perdedor baja su potencial económico,etc.). Que se pueda dar una reducción intra-país, no tiene sentido económico: las guerras no afectan sólo al patrimonio de ricos.
2º No se observa en las gráficas en los periodos de guerra en Europa (dejo fuera USA por entender que sufre muchas menos pérdidas que Europa) una reducción distinta y sustancial con respecto a la tendencia anterior o a la dominante. Así, en el periodo 1940-1950 la reducción es de aprox. 2 puntos (el 0,1 % anual). Por contra en el período entreguerras entre 1930 y 1940 la reducción es de 6 puntos (el 0,6% anual). No parece que la 2GM hay ampliado la reducción de desigualdad producida en el periodo anterior. Al revés, ha reducido su ritmo. 3ª La tendencia dominante. Si toma como referencia el periodo 1910-1980 le indicará que la reducción es del 17 % (0,24 anual). Es decir, los períodos de guerra están dentro de un periodo histórico más amplio en el que el que hay un tendencial caída de la desigualdad. Y esa tendencia tiene una tasa mas acelerada de reducción (0,24% anual) que la de los periodos afectados por la 2º GM (0,1 anual). Para analizar las causas de la tendencia de fondo de ese periodo 1910-1980, le dejo este libro ‘Public Spending in the 20th.Century. De Vito Tanzi y Ludger Schuknecht. En el se expone el aumento del gasto publico en la OCDE en el siglo XX. El gasto publico (El Estado Social, el socialismo democrático-socialdemocracia, ) se QUINTUPLICA desde la 1ª década del siglo. Desde Octubre del 1917, siendo precisos. Y en mi opinión, no la de los autores del libro, esa es la causa raíz de la reducción de la desigualdad (y de otros efectos) en el Siglo XX.
El voto egotrópico no es un villano del agente 007. No le discuto que sus guionistas debieran considerar seriamente su incorporación como personaje. Leyendo esta respuesta suya, y lo del Coliseo, estoy seguro al 100 %de que su notable y atípico sentido del humor ha sido una de las causas principales de mi afición a sus post del Otto Neurath. Sin duda. No se asuste, el voto económico, en sus variantes egotrópica y sociotrópica, es sólo una de las causas principales (junto con la identitaria) que la la investigación económica ha encontrado como justificación del voto y posición política de un elector en unas elecciones democráticas. Estudiado y muy conocido desde los 60 en Usa a partir de V. O. Key y Gerald H. Kramer, y España es una obra de referencia ‘El voto económico en la elecciones de 1.996 y 2.000. Una comparación’’ de Marta Fraile.
Saludos
La cuestion de los leones y los funcionarios. Siglo hablando del colectivo, no de casos particulares. ¿No cabría preguntarse si la actitud actual de ellos mismos en cuanto a su pasotismo absoluto en la defensa del estado como agente ecómico PARA TODA LA POBLACION no es es realidad, y de facto,hoy mismo, un 'echar a los leones' al resto de la ciuadania? Sabe cual es mi respuesta. Saludos, .
ResponderEliminarAntonio
ResponderEliminarVeo que sigues sin distinguir la desigualdad en la distribución de la riqueza y la desigualdad en la distribución de la renta. En el caso de la segunda, los datos muestran sin ninguna duda que esa desigualdad disminuyó con las guerras mundiales y con la crisis del 29, aunque te empeñes en negarlo.
Sobre el tema de los funcionarios, pues la verdad es que sigo sin verlos como una clase especialmente "pasota en la defensa del estado como un agente económico para toda la población"; más bien me parece que, en el espectro político los funcionarios están bastante más hacia el extremo "keynesiano" que la media de la población, pero es una percepción subjetiva, claro. Si tu percepción es que, entre los malos malísimos están, primero el club Bildeberg, y luego los funcionarios españoles, pues nada, tú mismo.
Un saludo